Dos meses de multa, con una cuota diaria de 6 euros. Es la condena que le ha impuesto el juez a un jefe que agredió a una de sus empleadas y le pegó un empujón con el que casi la tira al suelo. Además, el hombre tendrá que indemnizar a la mujer con 120 euros y abonar las costas del proceso. Así se detalla en la sentencia.

Los hechos que se consideran probados acontecieron en otoño de 2017, en una gasolinera de Molina de Segura. Durante una riña, «se produjo un enfrentamiento» en el que el hombre «cogió del brazo y empujó» a su subordinada. Ella sufrió lesiones que tardaron cuatro días en curar.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Molina de Segura condenó al jefe por un delito leve de agresión. El hombre recurrió ante la Audiencia, ya que, alegaba, él no hizo nada, sino que fue su trabajadora quien le insultó y, según su testimonio, llegó a arañarle.

El tribunal desestima el recurso de apelación del jefe y recuerda la declaración de una testigo, que estaba ahí para una entrevista de trabajo, que aseguró cómo vio que el hombre agredió a la mujer, que «no cayó al suelo porque había una chica detrás». Contra esta sentencia de la Audiencia ya no cabe recurso alguno.