La Plaza del Camionero de Jumilla cambiará radicalmente su imagen en las próximas semanas, ya que se convertirá en una glorieta sin semáforos. También se construirá una fuente ornamental de 13 metros de diámetro y el famoso 'monumento al camionero' se colocará sobre una peana.

El objetivo de esta obra, según aseguran desde el propio Ayuntamiento, es descongestionar el tráfico y ganar en seguridad «al confluir en la misma cuatro avenidas y una calle», según destacó la alcaldesa, Juana Guardiola.

«En estos primeros días se están llevando a cabo los trabajos de demolición de las isletas, con el objetivo de desviar el tráfico para que los trabajos se lleven a cabo con mayor seguridad», señaló el concejal de Obras, Francisco González. Igualmente, tanto la alcaldesa como el concejal del área señalaron que el panel cerámico que se ha dañado de forma fortuita será repuesto. «Se mantendrán todos los elementos con los que contaba la zona».

La glorieta contará con dos calzadas de dos vías de 4 metros cada una, sus correspondientes aceras y un carril bici de microasfalto rojo que conectará con el de la Avenida de la Libertad. Se instalará, además, señalización nueva, así como nuevas farolas tipo led y se reubicarán tanto las ya existentes como el mobiliario urbano.

El proyecto incluye la construcción dentro de la glorieta central de una fuente ornamental circular de 13 metros de diámetro, cinco efectos de agua y focos sumergibles led de 10 colores. Además, se instalará una peana de hormigón para la reubicación del Monumento al Camionero.

Para solucionar posibles inundaciones se van a instalar varios imbornales tipo buzón en diferentes puntos, que garantizarán la entrada de la escorrentía, quedando camuflados bajo la acera. Se renovará, además, el sistema de recogida de aguas pluviales. La duración de las obras será de unos tres meses. Se realizará en cinco fases para que el tráfico pueda seguir circulando.

Las obras están siendo llevadas a cabo por la mercantil Construcciones Ruiz Alemán por una cantidad de 298.900 euros tras un proceso de licitación en el que se presentaron 12 empresas. A finales de julio del pasado año se anunció que la gran plaza pasaría a ser una gran rotonda y que tendría un espacio de 1.400 metros, así como treinta señales de tráfico.

Los trabajos entonces fueron adjudicados en Junta de Gobierno Local a la empresa Ruiz Alemán, y tendrían un plazo de ejecución de tres meses. Las obras, según anunciaron, se realizarían en un total de cinco fases para que el tráfico pudiese seguir circulando mientras se ejecutan los trabajos.