La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la sentencia de un Juzgado de Instrucción de Molina de Segura que condenó al pago de una multa de 60 euros a un hombre que se presentó de madrugada en el domicilio de su tía anciana exigiéndole la entrega de dinero.

La sentencia, que desestima el recurso que presentó el acusado, señala que el Juzgado declaró probado que el incidente se produjo cuando aquel se personó en el domicilio y a voz en grito le exigió la entrega del dinero que le pedía.

Al mismo tiempo arrojó piedras a la fachada del inmueble con el fin de que su tía, de 78 años de edad, accediera a sus pretensiones.

La sentencia añadía que "estos hechos se han venido repitiendo en el tiempo, "sintiéndose la denunciante atemorizada por la conducta de su sobrino, ya que vive sola".

El Juzgado lo condenó, como autor de un delito leve de coacciones, a un mes de multa, con una cuota diaria de dos euros.

Ahora, la Audiencia Provincial de Murcia, al desestimar su recurso, señala que los hechos quedaron suficientemente probados en el juicio.

Y añade que el apelante se limitó a negar los hechos, sin dar una explicación razonable del porqué de la denuncia de su tía.

Señala también el tribunal, que tiene como ponente a la magistrada Concepción Roig, señala que "las propias circunstancias en las que se produjeron los hechos denunciados impiden que existan testigos diferentes de los implicados".

Para añadir que "sin embargo, la rapidez en interponer la denuncia, en el mismo día en el que ocurrieron los mismos, la ausencia de reclamación económica alguna, pese a relatar la existencia de daños en la fachada como consecuencia del lanzamiento de piedras y la falta de explicación del apelante de los posibles motivos de la denuncia corroboran lo manifestado por la denunciante".