La Nochebuena de este 2018 no la va a olvidar nunca Jennifer, una madre ciezana que tuvo que recurrir desesperadamente a la Policía Local de Cieza después de que su bebé de 10 meses se quedara encerrado en su coche y con las llaves dentro.

El nerviosismo se adueñó de esta mujer cuando salió de comprar unos regalos sobre las 19:50 horas de este pasado lunes de un hipermercado oriental situado en la carretera de Madrid, en la salía Cieza Norte hacia la autovía. Se dio cuenta de que se había dejado las llaves dentro, de que el coche estaba cerrado y de que su pequeña de tan solo 10 meses de edad se encontraba en llorando en el interior del vehículo, en el asiento del copiloto.

Fue entonces cuando la mujer requirió la presencia policial, ya que, según la Policía Local del municipio "manifestaba que su hija de meses de edad se había quedado dentro del coche y éste se había bloqueado con las llaves dentro del vehículo".

Personados en el lugar, los agentes se entrevistaron con la madre después de comprobar que la bebé se encontraba en aparente buen estado, aunque, efectivamente, lloraba desconsoladamente. A todo esto, la progenitora señaló la imposibilidad de contactar con algún familiar para saber si existía otra llave.

Fue entonces cuando los uniformados solicitaron autorización a la madre para fracturar un cristal del turismo, a lo que esta accedió. Los agentes procedieron a romper el cristal trasero izquierdo para no ocasionar daños a la pequeña, pero al tratarse de un cierre centralizado y con el bloqueo de niños activado, el coche no pudo abrirse y los policías tuvieron que repetir la operación pero esta vez con el cristal delantero del lado del conductor, procediéndose después al rescate del bebé.

La Policía Local se ha congratulado después de que esta historia haya tenido un final feliz, aunque ha subrayado la necesidad de extremar todas las precauciones cuando se viaja en coches con un bebé a bordo.