El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Lorca pedirá a la Delegación del Gobierno de Murcia explicaciones sobre el futuro del cuartel de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos, según anunció la concejala de Seguridad Ciudadana, Belén Pérez. Mientras tanto, los vecinos siguen preocupados por lo que ocurrirá con unas instalaciones que únicamente abren sus puertas al público durante una mañana cada semana, aunque reconocen que el servicio se sigue prestando todavía.

Los mismos vecinos han dado de nuevo la voz de alarma y aseguran que de los 4 agentes que había, se han marchado dos y de estos últimos, uno se encuentra de baja médica, por lo que queda solamente un cabo al frente de las instalaciones, hasta el punto de que tiene que abrir las puertas al público durante unas pocas horas a la semana.

Desde el equipo de gobierno del Partido Popular muestran su frontal oposición a que siga disminuyendo el número de agentes y mucho menos a que se cierre dicho cuartel, que no solo atiende las necesidades de Zarcilla de Ramos, sino que es una referencia en cuanto a seguridad para las pedanías altas de Lorca.

Según Belén Pérez, ''no puede ser que porque haya un agente de baja vayamos a permitir que se cierre el cuartel y por tanto, vamos a reunirnos con los vecinos, porque estamos sensibilizados con la situación y el primero de todos, el alcalde''. Desde el equipo de gobierno, según Pérez, ''iniciaremos los trámites para que de forma oficial se nos comunique si en alguna ocasión se ha planteado el cierre del cuartel de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos''.

Desde el equipo de gobierno, según la edil, ''mostramos nuestra más frontal oposición tanto al cierre como a que disminuya el número de efectivos que lo atiende''. El cuartel de la Benemérita de Zarcilla de Ramos atiende a una población de más de 5.000 personas distribuidas por las pedanías de La Tova, La Paca, Doña Inés, Avilés, Zarzadilla de Totana, Coy y Zarcilla de Ramos. Los vecinos se mantienen muy unidos en este sentido y aseguran que lucharán para que no se cierren las instalaciones.