Ilias Mohamed Ahmed, nacido en Ceuta hace 29 años, acabó en la cárcel más grande de la Región tras ser arrestado, en noviembre del año pasado, en una operación que la Policía Nacional llevó a cabo en su tierra natal. Se le acusaba de llevar más de medio año enrolado en las filas del Estado Islámico. El joven, presuntamente, hacía vídeos de propaganda terrorista y los distribuía por redes sociales. También se sospecha que ayudó a viajar a Siria, a combatir, a muchos chicos. Chicos que acabaron muertos. A la vista de los indicios que tenían los investigadores, el juez decretó el ingreso de este sospechoso en prisión provisional.

Y ahí sigue. Él es uno de los más de mil internos que hay en Campos del Río, y vive confinado en uno de los módulos de aislamiento donde se aparta a los reclusos más inadaptados y peligrosos. En el día de ayer, cuando tres funcionarios se disponían a sacarlo al patio, comenzó el incidente.

Según informaron a esta redacción fuentes penitenciarias, el reo se negaba sistemáticamente a ser cacheado por los trabajadores. En un momento dado, empezó a empujarlos, Ahí se produjo un forcejeo (con amagos de patadas y puñetazos, relatan los testigos) en el que el interno se mostró muy agresivo. Ilias Mohamed Ahmed tuvo que ser reducido por los tres funcionarios, que sufrieron lesiones, aunque no revisten gravedad.

Era un informante, el ´reportero´ del Estado Islámico, lo que en la terminología islamista es un combatiente encargado de trasladar órdenes directas y estratégicas del ISIS a sus miembros. Una figura clave en la obtención, almacenamiento y distribución de contenidos procedentes de los canales oficiales de la organización. Así se refería a este hombre la Policía cuando por fin lo detuvo, en noviembre del año pasado.

Fuentes penitenciarias pusieron el acento en la «amenaza creciente» que, denuncian, «está bajo el colectivo de prisiones con este nuevo terrorismo que se está instalando en España». Los funcionarios de prisiones, lamentan, «somos un exponente directo, al tener el trato directo con los presos en el interior de las cárceles. Con ellos y sus familias y amigos».

Las mismas fuentes subrayan que los yihadistas «es evidente que están ocupando el hueco que ha dejado la banda terrorista ETA» en las cárceles españolas.

Se da la circunstancia de que otro preso de Campos del Río, Mohamed Achraf, está considerado el cabecilla de un ´frente de cárceles´ yihadista. Este hombre cumple en la Región condena por liderar una célula, desarticulada por la Policía Nacional en 2004, que pretendía atentar contra objetivos emblemáticos de Madrid.

La pericia de estos trabajadores hizo que el ataque de ayer no fuese a más. Aunque el recluso se lió a puñetazos, y lanzó golpes a los afectados, lograron reducirlo. Y eso que, aseguran las mismas fuentes, el Ministerio del Interior no les facilita cursos de formación. Se tienen que buscar la vida ellos. Este mismo año, la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) y Fundación Euroárabe de Altos Estudios impulsaban en España el primer curso de la Comisión Europea sobre radicalización violenta.

Los sindicatos de prisiones quieren un paro para los días 24 y 26 de octubre y 6, 8, 13 y 15 de noviembre. Quieren mantener una «reunión urgente» con el actual ministro del Interior, «para pedirle una salida política al conflicto laboral». Llevan años denunciando la desigualdad salarial, así como la falta de personal y la inseguridad, aunque llevan 28 años sin una huelga general así.