"Si me muero, y tengo cuatro perras, el Estado se queda con ellas. Si puede servir a alguna persona, que le sirva". Así se expresa Antonio 'el Bizco', un vecino de Ricote de 70 años de edad, viudo y sin hijos, que busca mitigar su soledad.

Este hombre solicitaba este sábado la ayuda de LA OPINIÓN para dar con "una mujer, sea divorciada o soltera", que le cuide en el ocaso de su vida. No le importa que esta señora (le gustaría que fuese alguien menor de 50 años) tenga un hijo ya. "Se lo dejo todo", insiste.

"Si hay que salir de fiesta, se sale", comenta, al ser preguntado por qué le gusta hacer. En Ricote, señala, tiene "el parque al lado" de su casa, al igual que "el médico, que también lo tengo cerca, y la Policía".

Antonio admite que actualmente está "solo", al tiempo que señala que ya le han "dado tres infartos". "Lo que tengo, quiero dejárselo a una mujer que me cuide", reitera.

El fin: conocer a alguien, "que lleguemos a hablar y nos entendamos". "Si tiene un hijo, que venga aquí, que se empadrone en el pueblo, y lo recibiremos como un hijo", asevera. Y, cuando él falte, "todo lo que tengo, para ella". Porque "al casarse conmigo, la paga que tengo se la darán a ella" cuando Antonio fallezca.