La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 59 años de edad, que responde a las iniciales M. M. D., como presunto autor de un delito de abusos sexuales, indicaron fuentes cercanas al caso.

El suceso tenía lugar el pasado martes, día 9, en Bullas, localidad que estaba celebrando sus fiestas patronales. Una señora de 71 años se presentaba en el cuartel para denunciar que había sido objeto de tocamientos por parte de un hombre al que conocía del pueblo, aunque no mantenía relación alguna con él. El suceso aconteció mientras ella paseaba.

Según relató la víctima, ella se encontraba en un lugar público de la localidad, y el sospechoso, de origen búlgaro, la abordó, sin mediar palabra, y abusó sexualmente de ella.

La mujer tenía plenamente identificado al sujeto, tanto que hasta facilitó a los agentes su nombre y apellidos. Por tanto, el arresto del individuo se produjo poco después de la denuncia. Concretamente, dos horas después de que la señora presentase la denuncia. En el dispositivo intervino la Policía Local.

En el ataque, relató la mujer, el hombre no llegó a consumar la violación. La manoseó, señalaron las mismas fuentes.

El sospechoso pasó la noche en el calabozo, a la espera de ser puesto a disposición judicial. En concreto, se encargará del caso el Juzgado de Instrucción de Mula, informó el Instituto Armado.

Por otro lado, la Benemérita ha detenido en Águilas a un hombre de 36 años de edad, cuyas iniciales son P. S. L., después de su compañera sentimental denunciase que la había agredido físicamente. El arresto se produjo de madrugada. La víctima acudió al puesto del Instituto Armado en la localidad costera para explicar que su pareja le había pegado. Fue a denunciar después de ser atendida por los sanitarios, y presentó el parte de lesiones, tal y como informaron fuentes próximas a la investigación.

La mujer, de 49 años, explicó que el sospechoso y ella vivían juntos, y facilitó todos los datos para proceder a la identificación del individuo, que inmediatamente fue localizado y arrestado. Se le imputa un delito de violencia de género.

El sujeto pasó la noche en los calabozos, para ser puesto a disposición del Juzgado de Guardia, que decidirá su destino.