«La expresión ‘a dedo’ no es más que la forma coloquial de referirse al mecanismo de ‘adjudicación directa’ que la Ley de Contratos del Sector Público contempla para la concesión de determinadas prestaciones de servicios siempre que se cumplan las condiciones que establece la propia norma y que, en ningún momento, han sido incumplidas por esta administración local». Es lo que se lee en el comunicado remitido ayer a los medios por parte del equipo de gobierno de Cehegín.

Mientras, Ciudadanos entregaba en la Fiscalía las grabaciones en las que supuestamente el edil de Obras y Servicios de Cehegín, el socialista Ismael Abellán, se jacta de realizar adjudicaciones a dedo en los servicios de limpieza de edificios públicos, y de favorecer a una compañera de partido que integró la lista municipal en los pasados comicios.

El portavoz de Cs en la Región, Miguel Sánchez, junto al de Cehegín, Jerónimo Moya, entregaron las grabaciones para que se incorporen como prueba a la denuncia que Ciudadanos ya elevó a la Fiscalía por unas irregularidades detectadas en la adjudicación del servicio de limpieza, adjudicado a dedo en agosto de 2016, que volvió a otorgarse en enero de este año. Indicaron que lo llevan a la Fiscalía al superar la prestación del servicio que se desarrolló durante 23 meses los 54.000 euros «sin que mediara el preceptivo procedimiento de contratación», dijo Moya. Miguel Sánchez tacha la situación de «muy grave» y pide al líder del PSRM-PSOE, Diego Conesa, que cese al edil implicado.

Lo compara con Roque Ortiz

Sánchez ha recordado a Conesa que su partido «fue el mismo que puso el grito en el cielo cuando trascendieron las grabaciones de Roque Ortiz en Murcia (reveladas en exclusiva por LA OPINIÓN), y entonces sí que pidió dimisiones e invocó la regeneración y la limpieza e higiene democrática». A su juicio, «estamos hablando de presuntos delitos de prevaricación y cohecho, unas calificaciones muy graves que deberían obligar a Conesa a tomar medidas de inmediato».

Por su parte, Moya ha recordado que en la votación de la moción en que se exigía la dimisión del concejal, «el PP se volvió a poner de perfil y la marca de Podemos volvió a ponerse de lado del PSOE, su socio de gobierno».