Al haberse extendido el rumor de que en la sepultura del sacerdote de Caravaca de la Cruz Tomás Hervás García (fallecido el día 13 de febrero de 1957) pudiera hallarse la Sagrada Reliquia de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca desaparecida en febrero de 1934, el Obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, decretó exhumar los restos de dicho sacerdote para poder comprobar la veracidad o no del rumor.

Para realizar la exhumación, el Obispo nombró una comisión presidida por él y compuesta por el vicario episcopal de la Zona de Caravaca-Mula, D. Jesús Mondéjar; el canciller-secretario general y notario del Obispado, D. Tomás Cascales Cobacho; y el médico forense, D. Alfonso Sánchez Hermosilla.

La exhumación de los restos mortales del sacerdote Tomás Hervás se ha realizado esta tarde, pasadas las 16.30 horas, en el cementerio municipal de Caravaca de la Cruz, actuando como testigos el alcalde de dicha ciudad, D. José Moreno Medina; la hermana mayor de la Real e Ilustre Cofradía de la Vera Cruz, Dª. María del Carmen López Navarro; y familiares de D. Tomás Hervás García.

Tras realizar una oración por el eterno descanso del alma de D. Tomás Hervás García, se ha procedido a retirar la lápida funeraria y a derribar el muro del nicho. Con sumo cuidado y respeto, el médico forense ha separado los restos mortales de D. Tomás Hervás García, entre los que no se ha hallado vestigio alguno de la desaparecida Sagrada Reliquia de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca.