La escuela militar de paracaidismo Méndez Parada, ubicada en la base aérea de Alcantarilla, abrió ayer oficialmente el nuevo curso con una lección inaugural leída por el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, quien destacó su labor «en la defensa de España, de los derechos de los ciudadanos y de la paz en el mundo formando a los militares que garantizarán esos valores».

Miras alabó el papel de «una institución tan prestigiosa y respetada dentro y fuera de España», por la que en sus 71 años de existencia han pasado más de 100.000 alumnos para formarse como paracaidistas del Ejército. En ese sentido, subrayó «el prestigio de esta escuela, que se ha convertido en sinónimo de excelencia y profesionalidad y es un orgullo para la Región».

El presidente resaltó «la gran capacidad de adaptación, crecimiento y especialización de esta institución gracias a una importante evolución en sus materiales y medios técnicos a lo largo de estas siete décadas de historia». Así, la considera «la mejor escuela de paracaidismo de Europa» y destaca el papel de algunos de sus miembros, como la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire (PAPEA) y del Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (Ezapac), «motivo de admiración y orgullo para todos».

López Miras expresó también su «profunda gratitud» a las Fuerzas Armadas y al Ejército del Aire por todos aquellos momentos en los que han colaborado y ayudado ante catástrofes como inundaciones, terremotos o incendios.