Multitudinaria participación en la procesión con la imagen del Niño Jesús del Balate que tenía lugar durante la tarde de ayer en Mula, día grande de los festejos en honor al Niño en la localidad. La procesión culminaba en el Convento de La Encarnación, donde a las nueve de esta mañana dará comienzo la Romería de subida de la imagen hasta su santuario en el Balate.

Centenares de personas entre muleños y devotos de la imagen recorrerán junto al Niño los tres kilómetros que distan desde Mula hasta la pedanía de El Niño donde vivirán un día de convivencia entre familiares y amigos. Durante todo el trayecto los vítores y tracas en honor al Niño se sucederán en un ambiente lleno de fiesta y devoción.

Durante la noche y madrugada del día 20 al 21, como es tradición, los peregrinos acudieron a Mula, víspera de la festividad del Niño, día grande de las Fiestas Patronales de Mula. La devoción hacia la venerada imagen es tal que llegó a que miles de personas acudieran hasta Mula desde distintos puntos de la Región, y lo hicieron, la gran mayoría, a pie o en bicicleta; niños, jóvenes y adultos recorrieron durante la tarde-noche decenas de kilómetros para poder ver al Niño Jesús del Balate, que en estos días se encuentra en el Templo de Santo Domingo de Guzmán.

Acudieron de Ricote, Abarán, Blanca, Ulea Ojós, Villanueva, Archena, Ceutí, Lorquí, Las Torres de Cotillas, Molina de Segura, Murcia, Alguazas, Campos del Río, Albudeite, Pliego y las poblaciones del Noroeste, por carreteras, caminos, Vía Verde, sin que el cansancio importara.

Poco a poco, los peregrinos fueron llegando al templo (los más madrugadores fueron un grupo de ciclistas de Ceutí). Las horas de mayor afluencia de peregrinos en caminos y carreteras fue entre las 9 y las 11 de la noche.

Difícil se hace calcular el número. El pasado año, según datos de la Hermandad del Niño, acudieron mas de 4.500 personas. Este año, vista la afluencia, se podría haber superado esta cifra.

El Templo de Santo Domingo de Guzmán para la Misa del Peregrino a las 12 de la noche sequedó pequeño, siendo imposible que entraran todos los que acudieron. Tras finalizar la misa, la iglesia permanecía abierta para que todos aquellos que lo deseaban pudiesen visitarla y ver la imagen del Niño Jesús del Balate.

Miembros de la Hermandad del Niño atendieron a todos aquellos peregrinos que lo necesitasen, contando a lo largo de la peregrinación con la colaboración de distintas agrupaciones de Protección Civil así como de Guardia Civil y Policía Local.

Pese a lo dificultoso que tenían los accesos a Mula, dada la gran cantidad de personas a pie y de vehículos, no se registraron incidentes dignos de mención, tan solo aquellos derivados del cansancio y de los efectos de la caminata.