La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región ha desestimado el recurso presentado por una empresa de cítricos de Librilla contra la sentencia de un Juzgado que declaró improcedente el despido de una trabajadora fija-discontinua que al volver de Polonia de haber asistido al entierro de su madre se encontró con la extinción de la relación laboral. La mujer llamó al encargado de la empresa para informarle de lo ocurrido, pero el encargado le puso a la vuelta la firma de un documento en el que se manifestaba que la empresa le concedía vacaciones, escrito que aquella firmó, procediéndose después a su despido.