Rita y Ángel son vecinos del municipio de Lorca y, como tantas otras personas de la Región, ayer decidieron ir a la noche en vela de Aledo. Sólo que esta vez, aparte de colocar la tradicional vela, su relación cambiaría para siempre.

Y es que Ángel tenía un as bajo la manga, o mejor dicho un anillo de pedida en el bolsillo. Así que al llegar a la plaza principal del municipio hizo lo que venía días ensayando. Hincó rodilla y...el resto es historia. Ella se puso muy nerviosa, pero muy contenta y desde anoche están prometidos en futuro matrimonio.

El momento quedó registrado por alguna que otra cámara y para siempre en sus recuerdos. Algún día contarán orgullosos la romántica historia de su pedida.