La Audiencia Provincial ha desestimado el recurso de un vecino de Lorca que se encuentra en prisión provisional, a la espera de juicio por tráfico de drogas.

El hombre pidió al tribunal permanecer en libertad hasta que se fije la fecha de la vista oral.

El auto emitido por la Audiencia recuerda que en marzo de 2018 la Policía interceptó un vehículo en el que viajaban tres personas (entre ellas, este investigado) y que dentro del coche había 12 gramos de coca y 50 de hachís.

Después se practicó un registro en casa de este hombre. Allí, tal y como detalla el tribunal, los investigadores encontraron 366 gramos de cocaína en roca de gran pureza, que estaban ocultos en una caja fuerte. Asimismo, la Policía encontró en el domicilio 17.000 euros en billeres, una pistola eléctrica y útiles como el tráfico de drogas, tales como una balanza de precisión y una envasadora al vacío.

El sospechoso fue detenido y pasó a disposición judicial en el Juzgado de Guardia. La instructora consideró que había riesgo de fuga y de reiteración delictiva y lo mandó a la cárcel. También tuvo en cuenta la jueza, apunta la Audiencia, la falta de arraigo del hombre, a lo que se une que estaba en paro.

En su recurso, el acusado alega que sí tiene arraigo, pues vive en un dúplex de la Ciudad del Sol arrendado desde 2015.

Sobre la droga que había en su casa, alega que es que él es un adicto y que, de hecho, acude al Centro de Ayuda a Drogodependientes de Lorca, junto a su padre, también arrestado en este caso.

La Audiencia, al desestimar el recurso, señala que en la vivienda en cuestión «se acumulaba cocaína que excede mucho a la destinada al autoconsumo». También considera que «los riesgos de fuga y reiteración delictiva fluyen con vehemencia».

Fue la propia hermana del sospechoso la que en su momento denunció que éste y el padre de ambos se dedicaban a traficar con droga.

La mujer acudió a la Policía porque, presuntamente, los dos sujetos cogían el coche de ella para ir a vender estupefacientes.