El Ayuntamiento de Cieza va a externalizar el funcionamiento del Centro de Interpretación de Almadenes y ha aprobado una memoria para sacar a concurso su gestión. Este edificio fue construido durante los últimos años del anterior gobierno del PP y del exalcalde Antonio Tamayo.

Sin embargo, y según el actual edil de Turismo, Antonio Moya, «nos encontramos con una obra totalmente inacabada y que fue inaugurada por el ex presidente regional, Alberto Garre, con un grupo electrógeno de gasoil».

El pleno ha aprobado una memoria sobre las directrices de las que va a tratar el pliego de condiciones, que estará expuesto al público durante 30 días. Según Moya, las bases se han confeccionado de forma participativa con el resto de grupos políticos. Para su elaboración, el consistorio ha mantenido conversaciones con las personas que han participado en la puesta en marcha y construcción del centro, la empresa que se encarga actualmente del mantenimiento de la maquinaria, funcionarios municipales, funcionarios gestores de la Comunidad Autónoma de otros centros de acogida y visita en espacios protegidos, así como empresas y profesionales relacionados con el sector medioambiental y de ocio, turismo y tiempo libre.

Las conclusiones en cuanto a la potencialidad del edificio son claras, al tener una gran variabilidad de actividades y recursos que no poseen otros centros similares, lo que permitiría un perfil de usuarios muy diverso y que iría desde escolares y asociaciones, hasta familias y particulares.

Por otro lado incluye visitantes con un perfil que va desde el deportivo y medioambiental hasta el científico y cultural, además de un tipo de ambientes que incluye sobre todo la posibilidad de realizar actividades acuáticas y combinadas.

El Ayuntamiento quiere darle un enfoque a su explotación claramente participativo, primando la educación ambiental, el turismo de aventura y naturaleza y la proyección cultural. La empresa adjudicataria conseguirá un periodo de gestión de entre 5 y 10 años, gozando de unos tres años para adaptarse.

Por otra parte, y según las bases, como potencial acuático se podría estudiar la opción de solicitar y habilitar un tramo navegable del río hasta la presa de la Hoya García (para talleres de iniciación al piragüismo y descenso en balsa).

Además, la cercanía al embalse del Quípar y Cárcavo, permite también la posibilidad de realizar rutas y actividades de navegación y pruebas deportivas en estos lugares, lo que le aportaría al centro tener un elemento claramente diferenciador respecto a otros espacios y centros de interpretación y acogida. Incluso, en un futuro, se podrían ofertar actividades novedosas como 'aquabike' con bicicletas flotantes.

El año pasado la zona se despidió de una de sus actividades más emblemáticas y tradicionales, como era la prueba deportiva del Descenso del Cañón de Almadenes, que llegó a realizar hasta más de treinta ediciones año tras año.