La mujer y el niño de corta edad que resultaron con quemaduras producidas por un cohete que cayó sobre la terraza de su vivienda durante los fuegos artificiales de las fiestas de Moratalla son la madre y el hijo de Sofía López, la fallecida hace ahora dos años al ser corneada por una vaquilla durante el último encierro.

La abuela y el nieto se encontraban en la terraza cuando, hacia las doce de la noche del pasado sábado, cayó sobre la misma un objeto pirotécnico de los lanzados durante el castillo. Fueron trasladados a un centro asistencial, para ser tratados de las quemaduras.