Ella dice ahora que las lesiones que tiene en el rostro se las hizo en un accidente en su cocina. Hace unos días, la chica acudía al cuartel de la Guardia Civil para denunciar que su ex la había intentado violar. Y que le había pegado. El juez decidía mandar al sospechoso a prisión por dos delitos de agresión sexual, otro de acoso y otro de maltrato. Ayer, tenía que dejarlo libre.

Además, unos testigos que se presentaron ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Caravaca de la Cruz pusieron de manifiesto que no vieron en ningún momento cómo el joven le provocaba los malos tratos. El chico llegaba a los juzgados esposado, directamente desde la cárcel. Salía como un hombre libre y sin cargos.