El portavoz del grupo municipal de Izquierda Unida-Verdes en el Ayuntamiento de Lorca, Pedro Sosa, denunció que la balaustrada del siglo XVI que coronaba la torre de la iglesia de Santa María en los barrios altos, y que está siendo restaurada, «podría haber desaparecido y haber sido sustituida» por elementos más modernos. En este sentido, Sosa preguntará al equipo de gobierno por la actuación.

La denuncia de Izquierda Unida se centra en la restauración de la torre de la iglesia de Santa María. Según Sosa, «la torre se encontraba coronada por una balaustrada del siglo XVI muy similar a la existente en la girola de San Patricio». Dicha balaustrada, según el concejal, «requería de un proceso de restauración profundo, con reposición de elementos desaparecidos, pero, lejos de ello, lo que parece que se ha hecho es eliminar completamente los elementos originales y sustituirlos por una balaustrada de nueva factura».

Se trata, según el portavoz de Izquierda Unida-Verdes, «de una manera de proceder poco ortodoxa y nada acertada». Sosa quiere saber por qué no se han respetado los elementos originales y cuál ha sido el destino de todo ese conjunto de piedras históricas. Se pregunta, además, «si estas piedras a día de hoy están en una escombrera junto a los azulejos de 20 cuartos de baño, si han sido enajenadas o si alguien se las ha llevado para venderlas o para decorar patios o jardines privados».

Sosa recordó asimismo que el horizonte electoral del próximo año parece marcar el ritmo de las obras de rehabilitación de elementos importantes del patrimonio cultural lorquino, cuando las obras que afectan a éste deberían acomodarse exclusivamente a criterios técnicos y a la buena terminación de las mismas.

El edil señaló que las inversiones millonarias que se han ejecutado y se siguen ejecutando en Lorca en materia de rehabilitación del patrimonio cultural, «lejos de encauzarse a través de un plan global e integral que aborde con inteligencia la situación del corazón histórico de la ciudad, se han limitado a una suma inconexa de actuaciones puntuales en iglesias y casones históricos sin órden ni concierto, y sin seguir un plan sistemático de recuperación».