Las obras de remodelación de la calle San Isidro Labrador, más conocido como el camino del cementerio, evitarán que se inunde la zona por las continuas averías que había en la acometida de suministro de agua, según informó el Ayuntamiento al presentar el final de los trabajos. Se trata de uno de los proyectos incluidos en el Plan de Obras y Servicios y que era una demanda muy solicitada por numerosos vecinos de Pliego, siendo especialmente solicitado en el proceso de Presupuestos Participativos del pasado mes de enero.

Con la finalización de esta inversión se ha arreglado la calzada, que se encontraba muy deteriorada a causa especialmente de las raíces de los árboles colindantes, y también se han realizado mejoras técnicas de los servicios fundamentales y para la funcionalidad del tráfico. «Se ha aprovechado el arreglo de esta calle para cambiar la deteriorada acometida del suministro de agua, que en esa zona estaba dando bastantes problemas en los últimos tiempos con la reiteración de roturas y se ha sustituido por una nueva con materiales más modernos y duraderos», explican fuentes municipales.

También se han abierto dos nuevos espacios para el paso de los vehículos entre medias del boulevard peatonal del camino del cementerio, mejorando así la fluidez del tráfico que acude a los tanatorios, ya que los vehículos que quieran dirigirse hacia el carril de bajada para volver al centro urbano ya no tienen que subir hasta las inmediaciones del cementerio, tal y como sucedía hasta ahora.