El grupo parlamentario Socialista en la Asamblea Regional y el grupo municipal Socialista en el Ayuntamiento de Lorca volverán a llevar al pleno de ambas cámaras sendas mociones para exigir al Partido Popular que desarrolle todas y cada una de las medidas aprobadas, que continúan sin ejecutar y que siguen siendo necesarias para «tranquilizar a los vecinos que viven en las pedanías de Cazalla, Purias, Campillo, Torrecilla y El Esparragal», tras las inundaciones que se registraron en la zona en septiembre de 2012.

Tanto la diputada Isabel Casalduero como el concejal David Romera volvieron a poner de manifiesto la preocupación que sienten los vecinos afectados cada vez que se producen amenazas de lluvia.

Según ambos dirigentes políticos los vecinos piensan que «si volviera a llover de forma torrencial como lo hizo aquel fatídico 28 de septiembre de 2012, se repetirían las mismas consecuencias y saben qué zonas seguirán siendo las primeras en inundarse y qué casas volverían a anegarse en caso de que vuelva a llover como aquel día por lo que las pérdidas humanas y económicas, serían las mismas, y que no se ha hecho nada para prevenir la situación».

Por todo ello, vuelven a exigir al Gobierno regional que dé comienzo a las obras de ampliación de los viaductos de desagüe sobre la rambla de Viznaga de las carreteras RM-11 (autovía Lorca-Águilas) y RM-621 (antigua carretera de Águilas), «obra que se encuentra proyectada y adjudicada y que sigue paralizada».

Además, vuelven a instar al Gobierno de España para que la Confederación Hidrográfica del Segura elabore un Plan Integral de Defensa Contra Avenidas, que incluya una memoria y calendarización de actuaciones basándose en su preferencia atendiendo a la protección primaria de la población residente y sus sistema productivo.

Consideran asimismo imprescindible la construcción de presas de laminación de avenidas en la parte alta de las cuencas de las ramblas más problemáticas por los desaforados caudales que pueden llegar a generar como son las de Nogalte, Béjar y Torrecilla así como la restitución de los cauces históricos y la creación de una red de drenaje natural que finalice en la rambla de Viznaga.

Del mismo modo seguirán centrando su trabajo para promover el desarrollo de campañas institucionales de sensibilización a la población local sobre el riesgo de inundación y las formas de actuar velando por realizar una práctica urbanística coherente y racional.