Juan Fernández, Arquitecto Técnico, Ingeniero de Edificación y Máster en Patrimonio Arquitectónico es, ante todo, un enamorado del legado patrimonial del pueblo de Mula. La Torre del Reloj ha marcado durante siglos el devenir de la vida de los muleños. Actualmente es uno de los símbolos más característicos de la plaza del Ayuntamiento, el reloj que sigue marcando las horas y la tradición que marca el inicio de uno de los festejos más arraigados en la localidad, la Noche de los Tambores. ¿Cuál es el significado real de la Torre del Reloj de Mula?

Pese a la extendida creencia de que la Torre del Reloj se construyó como mera representación del poder civil frente al religioso, ostentado por el campanario de la parroquia de San Miguel, el reloj está, o más bien estaba, plenamente vinculado a los riegos de la huerta. Era el encargado de marcar las tandas, pues este era el sistema por el que se regía el reparto de agua en Mula.

¿Existen datos históricos documentales sobre la Torre del Reloj?

Por supuesto que existen datos documentales, buena parte de mi libro está basado en datos históricos recogidos en diversos fondos del Archivo Municipal de Mula. Al tratarse de un edificio municipal, el Concejo recogía en papel todo lo concerniente a tan importante construcción. Por desgracia, algunos documentos que habrían sido importantísimos para este libro, se han perdido a lo largo de la historia, pero son los menos.

¿Cuál o cuáles son los aspectos que más le han llamado la atención de la Torre?

La prematura aparición de la Torre del Reloj en Mula, pues fue uno de los primeros edificios de cierta relevancia social en construirse en la plaza pública, cuando ésta aún estaba conformándose. En Mula, tenemos una torre dedicada expresamente a albergar el reloj y campanas desde el primer cuarto del siglo XVI, caso único en la Región.

¿Cuál es el momento más importante de la vida de este emblemático edificio?

El derrumbamiento de la torre a mediados del siglo XVII o la construcción de la actual a comienzos del siglo XIX.

¿Hay algún otro monumento sobre el que tenga interés por descubrir en Mula?

Ya he investigado sobre varios edificios como el Heredamiento de Aguas, el Casino, las murallas medievales, etc., de los que he realizado algunas publicaciones en revistas y congresos. Un tema que me interesa mucho es la arquitectura de los siglos XIX y comienzos del XX, así como las figuras de los maestros de obra. Sí es cierto que hay algunas construcciones con una mayor relevancia turística o histórica, en el caso de Mula el Castillo siempre ha sido el emblema.

¿Qué destacaría, en el aspecto histórico y patrimonial, de los municipios del interior de la Región?

A menudo se suele poner la vista, y el dinero, en las mismas ciudades a la hora de recuperar el patrimonio, olvidando otras zonas que tienen un gran potencial turístico pero escasas posibilidades para poner en valor sus recursos. Este es el caso de Mula, sin duda una de las ciudades con más historia de la Región de Murcia. Cuando Murcia capital se fundó, Mula tenía siglos de historia. Por suerte, parece que en los últimos tiempos esta situación va cambiando en Mula gracias a la concienciación ciudadana y, por supuesto, a la labor del Ayuntamiento. En los próximos años Mula puede convertirse en un gran referente regional en cuanto a conservación del patrimonio, pero para ello hay que seguir trabajando.