Casi un año después de la nevada que afectó gravemente al pabellón deportivo Loli de Gea de Cehegín y a la cubierta del edificio anexo donde se ubicaba la piscina climatizada, ésta se podrá abrir al público. El alcalde de la localidad, José Rafael Rocamora, ha explicado que las obras eran una prioridad para el Consistorio, poniendo de manifiesto que han tenido serias dificultades para buscar financiación y «dificultades dentro del propio escenario político que para nada nos ha facilitado ser más ágiles en la respuesta a los ciudadanos».

Al respecto de la prioridad de las obras manifestó que «la totalidad de prácticas deportivas que se venían desarrollando en el pabellón se podían realizar en otros centros, pero quien quisiera hacer natación tenía que marcharse fuera del municipio».

Rocamora visitó las obras, que esta realizando la empresa Montajes Ferroviarios e Instalaciones, acompañado de los ediles de Deportes y Obras y Servicios, Joaquín López e Ismael Abellán. Unas obras que esperan estén concluidas a finales del mes de enero, y que tendrán un coste de 182.531,97 euros IVA incluido, aportado íntegro por el Ayuntamiento de Cehegín.

Con esta intervención se está procediendo a aumentar el espesor de aislamiento de la cubierta colocando otro panel encima del existente, también a la rehabilitación de la estructura reforzando los perfiles necesarios, la sustitución del deshumidificador de aire y depósito de agua caliente solar, así como de la instalación de iluminación; también se va a disminuir la profundidad de la piscina y una puerta en el vestíbulo de entrada a la piscina y apertura de huecos para ventanales a la piscina. Se inicia así el proceso de construcción de las nuevas instalaciones deportivas tras perderse el Pabellón en la nevada del pasado año. El Ayuntamiento tiene la intención de abrir la piscina, realizar unas pistas al aire libre donde antes se ubicaba el pabellón y construir un nuevo centro deportivo en el Almarjal.

Unas obras, que tras la negativa del Ministerio a la solicitud de petición de préstamo, el Consistorio llevará a cabo con fondos propios y con la indemnización del seguro por el derrumbe del pabellón. Un proyecto que estaría rondando el millón de euros y que podría ser una realidad antes de que finalice la legislatura.