Los trabajadores de la cantera de Arimesa volvieron a concentrarse ayer junto al Ayuntamiento de Santomera gobernado por el PSOE y Podemos (Alternativa por Santomera) ante la nueva amenaza de cierre recibida en la empresa en la que trabajan 51 empleados de las que dependen sus familias. «Para los trabajadores es una orden injusta y que pone en riesgo su futuro y el de sus hijos a sabiendas de que la licencia se está tramitando. Desde el Consistorio pretenden cerrar la empresa dilatando los plazos para no conceder la licencia», aseguran fuentes de los empleados.

Francisco José Palazón, ingeniero de minas y portavoz de los empleados, asegura que, «a día de hoy, se cumple con toda la legislación vigente y se espera el último permiso medioambiental como obliga la Comunidad Autónoma competente en esta materia». Para los trabajadores «se trata de una actitud negligente de los socialistas y Podemos, que ostentan la alcaldía y poder municipal en coalición y mantiene la incertidumbre del futuro de la empresa y los empleados».

Los empleados de Arimesa, que temen acabar en el paro, acusan a la alcaldesa, Inma Sánchez, de traicionar la voluntad del viejo socialista de Santomera, Julián Andugar, cuya imagen preside la entrada al Consistorio de Santomera con motivo del centenario de su nacimiento.

Los operarios tienen previsto continuar las acciones reivindicativas, «porque está en juego su medio de vida y el de sus 51 familias», según manifiesta el ingeniero de minas y portavoz, Francisco José Palazón.

Los empleados se muestran indignados con la alcaldesa del PSOE, Inmaculada Sánchez Roca, porque no les recibe y «los mira por encima del hombro», según los trabajadores. La empresa lleva meses a la espera de la certificación municipal tras recibir todos los informes positivos de los departamentos de la Comunidad Autónoma para continuar con la producción. Según los operarios, «nada impide a la compañía cumplir con la legalidad vigente salvo el retraso injustificado de la licencia del Ayuntamiento».

Los empleados de Arimesa dicen que Sánchez Roca «persiste en su actitud negligente sin justificar el fin último de su acción. Hace dejación de sus obligaciones como primer edil y deja que Alternativa por Santomera tome decisiones espurias en contra de los trabajadores». Además, no descartan «iniciar acciones legales junto con la compañía ya que, tanto ella, como sus socios de gobierno, Alternativa por Santomera, mantienen una actitud próxima al delito».