Agentes del Instituto Armado arrestaban ayer por la mañana a un joven como presunto autor del apuñalamiento mortal que tuvo lugar el miércoles por la tarde en ‘la ciudad sin ley’, una barriada deprimida de Águilas.

En el suceso perdió la vida un hombre de 47 años y resultó herido su hijo, de 26. Precisamente fue este chico (que ya ha sido dado de alta del hospital Rafael Méndez, donde ingresó con una puñalada en el cuello) quien contó a los investigadores quién le había atacado. Dio el nombre del sospechoso, al que la Benemérita tenía cercado. El acusado pasó ayer la noche en los calabozos, a la espera de ser conducido a los juzgados de Lorca, donde el juez le tomará declaración y previsiblemente ordene su ingreso en prisión.

El sospechoso (que no llega a los 30 años de edad) es vecino de la Ciudad del Sol, aunque sus padres residían en Águilas.

La alcaldesa de Águilas, Mª Carmen Moreno, indicó que el entierro de la víctima mortal tendrá lugar hoy en el municipio costero. La regidora socialista admitió que ‘la ciudad sin ley’ es «una zona conflictiva, complicada» en la que es habitual el tráfico de sustancias estupefacientes.

Entre los planes del Consistorio está regenerar esta barriada, para lo cual ha solicitado ayudas a la Unión Europea.

Preguntada por si teme una oleada de violencia en la localidad tras los sucesos del miércoles, Moreno apuntó que lo ocurrido es «muy puntual».

En cuanto al origen de la riña que acabó en tragedia, comentó que «al parecer, la hija de uno (de los implicados) quería salir con el hijo de otro», relación a la que se oponían sus parientes. Fuentes cercanas al caso explicaron que las dos familias implicadas en la tragedia han decidido marcharse de Águilas.

Por otro lado, los Bomberos tuvieron que intervenir el miércoles por la noche para sofocar un incendio en una vivienda de la calle Calabardina de Águilas, el mismo lugar donde horas antes se produjo el apuñalamiento mortal de un hombre.

El suceso ocurrió sobre las doce y media de la noche, hora a la que el Centro de Coordinación de Emergencias recibía el aviso de que había un domicilio ardiendo. La persona que llamó aseguró que en la casa vivía mucha gente, pero que creía que en esos momentos no había nadie en el interior. Salía mucho fuego de las ventanas y estaba ardiendo el salón.

Al lugar se desplazaron bomberos del Consorcio, que no tuvieron que desalojar a nadie, ya que la casa estaba vacía y no hay otras viviendas cerca. Una mujer de 73 años, residente en la zona, tuvo que ser atendida in situ por un ataque de ansiedad, aunque no precisó ser trasladada a un hospital.

El Instituto Armado investiga si el incendio de la casa fue intencionado, pues la casa es propiedad de uno de los clanes implicados en el apuñalamiento del miércoles por la tarde.