El palacio de Villaescusa de Lorca reabrirá sus puertas en enero como sede de varias concejalías y servicios municipales, completamente remozado tras un proceso de rehabilitación integral tras los terremotos de 2011 que ha precisado casi dos años de trabajo y una inversión de casi 400.000 euros.

El alcalde, Fulgencio Gil, supervisó ayer el resultado de esos trabajos que han permitido aligerar el edificio en 300 toneladas de peso para hacerlo más estable y seguro ante posible nuevos terremotos, eliminando encofrados de hormigón y vigas de acero, que se añadieron al inmueble tras su construcción y que habían alterado la masa del edificio y su inercia.

Este palacio, un edificio construido en el siglo XVII con ampliaciones del XVIII y el XIX, es la sede de las concejalías y servicios municipales de Contratación, Estadística, Patrimonio y Turismo, y su restauración era la única que quedaba pendiente de entre los edificios históricos propiedad del Ayuntamiento, aseguró Gil. El proyecto de recuperación ha combinado las técnicas y materiales tradicionales como la madera, con otro otros de vanguardia como la fibra de carbono para aligerar el peso, que sí mantiene todas las bóvedas tabicadas de ladrillo originales.

La intervención ha respetado la estructura de la caja de escalera ha requerido, además, el refuerzo de su piso más alto, conectando sus esquinas, así como con la comprobación de la existencia de un durmiente superior de madera, para apoyo de la estructura.