"Me he cargado a un hombre a tiros, que venga la Policía"

Cuando llegó la Policia, Juan se entregó y entregó también el arma del crimen, una escopeta. A continuación, guió a los investigadores al lugar donde estaba el cuerpo de Manuel. Le había pegado un tiro en la cabeza.

«Vimos a un hombre con una escopeta. Escuchamos los tiros y pensé que estaban matando conejos», relata una mujer, que paseaba con su marido por la zona cuando se produjo el crimen. «Madre santa, por Dios», expresa el hombre. «No los conocíamos», añadió anoche la mujer.

El presunto agresor, de 72 años, fue detenido y el arma de fuego intervenida. Sobre las once menos cuarto de la noche llegaba el furgón de la funeraria. Ya se encontraba en el lugar la comitiva judicial, para proceder al levantamiento del cadáver. Dado que el cuerpo se encontraba en una zona de huerta, a la que el vehículo no podía acceder, los operarios llevaron el cadáver en camilla hasta la salida del túnel.

El suceso generó una gran expectación en la zona. «Se la ha venido a cargar el que menos culpa tiene», lamentaban los vecinos. Lo decían sobre Manuel, la víctima del crimen, de 58 años.

De su presunto asesino, Juan López, explicaban que era un hombre que «tenía que estar encerrado hace tiempo ya». Aseguran que era una persona violenta, tanto con su familia como con los vecinos.

Otros vecinos de La Ribera de Molina apuntaron que Juan había estado comentando durante el día sus intencionesde matar a Manuel. «Yo no me lo he tomado en serio, no pensaba que fuera capaz», confesaba un hombre. A otros vecinos, Juan les llegó a decir: «Mañana me veréis en la cárcel».

La víctima, Manuel Leal, además, había sido concejal de Policía en el Ayuntamiento de San Javier, su tierra natal. En la actualidad, trabajaba como vigilante de seguridad en la Consejería de Hacienda, en el centro de Murcia, apuntaron fuentes cercanas.