La Fundación Casa Pintada de Mula (FCP), en concurso de acreedores desde la pasada semana, ha emitido un comunicado, a través de su secretario ejecutivo de la Fundación, Cris Gabarrón Cabero, al que ha tenido acceso LA OPINIÓN y en el que se indica que la FCP no reducirá al Ayuntamiento la deuda de más de un millón de euros contraída con la misma desde 2004. «En lo que respecta a la cantidad adeudada en la actualidad, ésta no podrá ser objeto de reducción en ningún caso, puesto que supondría un perjuicio a los derechos de los acreedores que la legislación no permite», afirma.

Sobre la entrada de la Fundación en concurso de acreedores, destaca que «la FCP se creó en virtud del convenio suscrito entre el Ayuntamiento de Mula y la Fundación Cristóbal Gabarrón el 27 de mayo de 2004, convenio que fue aprobado por unanimidad por el pleno municipal. Así, el Ayuntamiento asumió las obligaciones de cesión del uso y disfrute de la Casa Pintada y del Convento de San Francisco por un plazo de 25 años y dotación por un plazo de diez años de los fondos necesarios para el desarrollo de las actividades culturales relacionadas con el objeto fundacional». Sobre las mismas, el comunicado destaca que el Consistorio ha incumplido parcialmente sus obligaciones, «impidiendo a la Fundación Casa Pintada desarrollar su actividad, y privándola de los fondos económicos previstos, adeudando a fecha de este comunicado más de un millón de euros».

No obstante asegura que la FCP «siempre ha intentado articular una solución amistosa que permitiese el cumplimiento de estas obligaciones, evitando acudir así a la vía judicial». Respecto a la entrada de la Fundación en concurso de acreedores destaca que «como consecuencia de la injustificada postura del Ayuntamiento, fruto de las decisiones personales del alcalde y, para evitar cualquier perjuicio a sus acreedores, la FCP se ha acogido al procedimiento concursal».