La Policía Local volvió ayer a avisar a los inquilinos del edificio 'Euromanga I' para que desalojasen sus estudios. La decena de personas que aún vive allí, en su gran mayoría ancianos, se negó a marcharse, como ya hicieron en días anteriores. Todo ello pese al informe del arquitecto municipal, que obliga a que el bloque situado en el kilómetro 6 de La Manga, término municipal de San Javier, se desaloje y precinte. Ante la negativa de los residentes a irse, el Consistorio ha recurrido a la vía judicial para desalojarles, tal y como informaron a esta Redacción fuentes del Gobierno municipal.

El inmueble, construido en los años 70, tiene la estructura dañada, debido a un proceso de carbonatación que ha sufrido el hormigón, según el análisis de los técnicos municipales. Dicho peritaje se ha hecho motivado por la propia comunidad de propietarios, a quien los residentes culpan de no darles información y actuar con «opacidad» por «intereses económicos».

Comunidad y vecinos no se entienden a la hora de arreglar el bloque de apartamentos. Los residentes apuestan por reformarlo con una empresa, que pide 150.000 euros, mientras que la comunidad de propietarios propone otra compañía, que cuesta mucho más, un millón de euros.

Miedo «infundado» al derrumbe

Mientras tanto, los inquilinos que aún se resisten a marcharse critican que el Ayuntamiento «tiene un miedo infundado a que se caigan los balcones, porque el edificio es similar al 'Mónaco', donde se descolgaron cuatro terrazas las pasadas navidades». Los inquilinos se reunieron ayer con los técnicos municipales y el edil de Urbanismo para pedir el informe del arquitecto municipal. Según el Consistorio, el documento no se les facilitó porque se negaron a requerirlo por escrito. Los residentes prometen que se irán si les enseñan el informe y ven que se demuestra, con argumentos convincentes, que corren peligro si siguen viviendo en el 'Euromanga I'.