Mario C.M., el joven al que se juzga desde ayer ante un jurado popular en la Audiencia Provincial acusado del asesinato de una anciana de 83 años, ocurrido en Alhama de Murcia en abril de 2014, ha calificado de "fantasmadas" los mensajes que en los días previos se cruzó con varios amigos y cuyo contenido guarda mucho parecido con la forma en que se cometió el crimen.

En esos mensajes, según ha puesto de relieve la letrada que ejerce la acusación particular en nombre de los hijos de la víctima, Remedios Martínez, el acusado hacía referencia a que era conveniente al cometer un hecho delictivo llevar guantes para no dejar huella y capucha.

Además, explicaba cómo debía utilizarse un machete y la forma de cometer un robo, que podía hacerse "al modo fantasma", en referencia a actuar por sorpresa.

A las preguntas de la acusación particular, que ha insistido en que las expresiones contenidas en los mensajes tienen mucha similitud con el "modus operandi" del crimen, ha contestado una y otra vez que "eran fantasmadas, para vacilar con mis amigos, porque ellos también fardaban mucho", además de declararse inocente de los hechos que se juzgan.

Al ser preguntado respecto a si el hecho de tener desconectado el GPS de su teléfono móvil en las horas del crimen fue para que no se conociera dónde se encontraba entonces, ha manifestado que solía tenerlo así para que no consumiera batería.

Y ha añadido que en la actualidad existe un programa ofrecido por las operadoras de telefonía por el cual se puede descubrir el posicionamiento aunque aquel dispositivo no esté conectado.

Durante el interrogatorio, ha reconocido que en los tres años que lleva en prisión se le ha abierto una treintena de expedientes disciplinarios, por peleas, lo que ha dicho que todas ellas fueron provocadas por los insultos que recibe al considerarlo un asesino.

A las preguntas de las acusaciones ha contestado que tiene una colección de navajas, de pequeñas dimensiones, y ha comentado que "a mí me gustan, como a otros les gustan los sellos, y estoy en mi derecho de tenerlas".

La vista oral se reanudará este viernes con el interrogatorio a cargo de su defensa, tras lo cual se procederá a tomar declaración al segundo acusado, Juan Jesús M.N.

El fiscal, Luis Arán, reclama para Mario C. penas que suman 23 años y seis meses de prisión y multa de 4.500 euros por los delitos de asesinato, robo con violencia -por la sustracción de tres alhajas a la víctima- y contra la administración de justicia, por un escrito amenazante que envió a Juan Jesús M.N.

El ministerio público reclama para este último cuatro años y tres meses de prisión, al atribuirle solo el delito de robo, aunque en la sesión de este jueves ha dejado abierta la posibilidad de acusarle también como encubridor del asesinato si el desarrollo del juicio así lo aconseja.

Por su parte, la acusación particular reclama penas de treinta años de cárcel para uno y otro al considerar que ambos son responsables del asesinato, "un crimen horrendo que debe tener una respuesta contundente".

Además, ha recordado que la anciana fue degollada de manera alevosa, produciéndole unas heridas en el cuello que ocasionaron su fallecimiento en un corto espacio de tiempo.

Mientras tanto, las defensas de los dos solicitan su absolución porque, como han expuesto en esta sesión de la vista oral, "están convencidas plenamente de su inocencia".