Un vecino de Lorca presuntamente relacionado desde hace años con el tráfico de drogas se declaró en la mañana de ayer inocente en un juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Murcia, en el que, al hacer uso de su derecho a la última palabra, comentó que «su pasado le persigue».

El acusado, M.M., para quien su letrado, Raúl Pardo-Geijo Ruiz, pidió la absolución, negó que una bolsa con droga que fue recogida por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de Lorca en octubre del año 2013 tras haber sido arrojada por la pasarela de Manterola fuese suya.

El acusado señaló que como con anterioridad estuvo incurso en algunos casos de tráfico de drogas, estos últimos hechos también le fueron atribuidos a él, sin que realmente tuviera responsabilidad alguna en los mismos. Asimismo expuso a la sala que, «desde hace años no hace nada de esto y que ahora se dedica a su familia y, en especial, a disfrutar de sus nietos».

Igualmente manifestó que actualmente vive de la pensión que percibe, y que no necesita recurrir al tráfico ilícito de estupefacientes para obtener ingresos, ya que con los medios legales de los que dispone «podría vivir incluso mejor».

Por su parte, la fiscal del caso solicitó para él cuatro años de prisión al considerar probado que la bolsa encontrada contenía once papelinas de cocaína, mientras que la defensa solicitó la absolución.

Se rompió la cadena de custodia

El letrado defensor Pardo-Geijo Ruiz expuso que se rompió la cadena de custodia de la droga y que la bolsa donde se encontraba la droga ha desaparecido, por lo que ha resultado imposible encontrar huella alguna en la misma, lo que prueba que la autoría de su defendido no está acreditada.