La carretera de la red regional RM-714, que conecta Caravaca de la Cruz con Calasparra, Venta del Olivo y Jumilla, será la primera vía murciana donde se instalarán guías sonoras longitudinales para mejorar la seguridad de los conductores. Así se lo indicó la Dirección General de Tráfico (DGT) a la Consejería de Presidencia y Fomento, según recogieron ayer fuentes regionales en una nota de prensa.

Esta iniciativa forma parte del plan presentado por el Ministerio del Interior contra la siniestralidad y que alberga la instalación de guías sonoras en 3.000 kilómetros de carreteras convencionales de todo el país, con un presupuesto de 5 millones de euros.

La DGT eligió la vía RM-714 para instalar este elemento de seguridad, una medida poco costosa que se aplicará en las carreteras de la red regional de nueva construcción y en aquellas que se reparen. Las guías sonoras longitudinales buscan evitar la salida de la vía y las invasiones del carril contrario en carreteras convencionales y de un carril por sentido. Esta medida reduce entre un 67% y un 29% las colisiones frontales, según datos del Ministerio del Interior.

Se trata de elementos fresados en el pavimento que se colocan en el eje central y en los laterales y que alertan cuando un vehículo se sale del carril, ya que cuando los neumáticos pasan por ellas el conductor recibe la señal sonora y la vibración en el vehículo, lo que le permite corregir su trayectoria.

Estos elementos no se deterioran por el paso de vehículos, no afectan al repintado de las marcas viales y no se dañan con la maquinaria de mantenimiento de carreteras, como quitanieves.

Además, como experiencia piloto, se aplicará previamente en un tramo de cuatro kilómetros de la carretera RM-11 (autovía de Lorca a Águilas). A la colocación de las guías sonoras en este tramo de prueba asistirán técnicos de la DGT y de la Consejería para comprobar su eficacia, según citaron las mismas fuentes.