Más de un millar de niños lorquinos pertenecientes a las cofradías que hacen posible cada año la Semana Santa participaron ayer tarde en la XVIII edición de la Procesión del Papel, que tuvo como principal escenario la céntrica calle Corredera. Se trata de uno de los eventos más singulares de cuantos se desarrollan en la ciudad ya que representa los desfiles bíblico-pasionales de la Semana Santa de Lorca utilizando materiales como el cartón, plástico o papel, entre otros. Además, mañana tendrá lugar la bajada del Calvario y el viernes que viene se llevará a cabo la Procesión del Silencio en el barrio de San Cristóbal. En la organización del desfile de ayer participaron jóvenes de los pasos Blanco, Azul, Encarnado, Morado y Resucitado. El acto contó con la colaboración del Ayuntamiento y del Consejo de la Juventud, cuyo presidente, Ricardo Trapero, agradeció el esfuerzo realizado.