Agentes de la Policía Local detuvieron ayer a R. M. J., de unos veinte años y residente en Molina de Segura, como presunto autor de la muerte de un hombre de unos cuarenta años, al que asestó una puñalada letal cuando se encontraba en el Hospital acompañando a unos familiares.

Al parecer, el agresor mantenía una disputa con unas muchachas en el área de Admisión del hospital y la víctima intentó mediar en la pelea. Fue entonces cuando el joven, que según testigos presenciales mostró una actitud violenta, atacó supuestamente a la víctima, cuyo nombre era Juan Carlos, con un arma blanca, hiriéndole en el tórax. Al cierre de esta edición se desconocían las causas que pudieron desencadenar la disputa entre los jóvenes.

Las fuentes consultadas explicaron que el fallecimiento se produjo de manera casi inmediata, sin que los sanitarios pudieran hacer nada por su vida. Fuentes de la Policía Nacional confirmaron los hechos, que ocurrieron a primera hora de la tarde de ayer.

Posteriormente, el agresor se dio a la fuga, pero la Policía, que lo conocía al tratarse de una persona con numerosos antecedentes, consiguió darle alcance en las inmediaciones de su domicilio.

Por su parte, el director gerente del Hospital de Molina de Segura, Pedro Hernández, declaró sentirse consternado por el suceso y explicó que, aunque atendieron a la víctima «con toda la celeridad y el personal del centro, la puñalada fue letal y no pudimos hacer nada por su vida». Hernández, que calificó a Juan Carlos de «héroe», añadió que familiares del fallecido y algunos trabajadores del Hospital tuvieron que ser atendidos por personal del Servicio Psicológico de Cruz Roja.

Por su parte Juan Pedro Fernández, director de Recursos Humanos del citado centro hospitalario, explicó que los hechos ocurrieron en cuestión de segundos y destacó también la intervención de los guardias de seguridad, que «consiguieron que la cosa quedara ahí, porque el muchacho intentó seguir atacando, aunque finalmente terminó huyendo».

El joven fue trasladado a las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía de Molina de Segura en torno a las nueve y media de la noche, donde, posteriormente, tuvo que ser atendido por personal del Servicio de Emergencias del 061. Está previsto que preste declaración y pase a disposición judicial en los próximos días.

Por su parte, Patricia Fernández, alcaldesa de Archena, el pueblo natal de la víctima, decretó ayer dos días de luto por el trágico fallecimiento de este vecino, que trabajaba en Acciona, la empresa concesionaria del servicio municipal de aguas de la localidad .