La Guardia Civil detuvo en Lorca a dos hombres de 34 y 59 años como presuntos autores de una quincena de delitos de robo con fuerza y hurto en fincas agrícolas y granjas del municipio, de los que se habían llevado frutas, herramientas y material agrícola, remolques ligeros y maquinaria. Los agentes llevaron a cabo inspecciones periódicas en centros de gestión de residuos para hallar objetos sustraídos que dieron sus frutos al detectar varios de ellos, lo que permitió desenmascarar lo que han calificado de robos a la carta. Los objetos elegidos vistos en las fincas eran ofertados primero a posibles compradores y si se llegaba a un acuerdo, los robaban para ellos, y también ofertaban por internet otros objetos robados cuya venta no estaba apalabrada. Entre los efectos recuperados se encuentran cuatro remolques ligeros agrícolas y 10.000 metros de tubería de riego de gran valor para las plantaciones.

Los detenidos son vecinos de la diputación lorquina de Zarcilla de Ramos. Los inmuebles afectados eran fincas, granjas y casas de campo, y el objetivo de los robos también era muy variado, ya que sustraían tanto productos del campo -naranjas- como material y herramientas agrícolas -10.000 metros de manguera de riego, varios remolques ligeros y otros enseres y maquinaria agrícola.

Los guardias civiles llevaron a cabo una serie de inspecciones periódicas en centros de gestión de residuos con la finalidad de hallar objetos sustraídos en los robos investigados, que dio sus frutos al detectar la comercialización ilícita de varios de estos objetos.

Las pesquisas practicadas permitieron a los agentes centrar la investigación sobre dos delincuentes habituales y desenmascarar su modus operandi. Su actividad delictiva se iniciaba con el estudio de los futuros objetivos y la selección de los objetos a sustraer. Una vez determinada la viabilidad del robo, los objetos elegidos eran ofertados a posibles compradores y, si se llegaba a un acuerdo, se materializaba el robo, generalmente empleando la fuerza, y se realizaba la transacción, lo que popularmente se conoce como ´robo a la carta´.

Los investigadores también han constatado que los ahora arrestados ofertaban por internet, valiéndose de aplicaciones de compraventa de objetos de segunda mano, los objetos sustraídos que no vendían a sus colaboradores, para lo que utilizaban nicks y datos personales que, en principio, no pudieran vincularse con su persona.

Entre los efectos recuperados se encuentran cuatro remolques ligeros agrícolas. Para vender estos remolques, el presunto autor atrajo a un comprador a través del portal digital y acordó un encuentro con el mismo para llevar a cabo la operación de compra-venta y entregarle el remolque en el propio lugar donde se guardaba. Con anterioridad al encuentro y con la finalidad de no levantar sospechas, el ahora detenido se trasladaba a la finca donde había localizado el vehículo, forzaba el candado de cierre originario y lo reemplazaba por uno de su propiedad. Algunos de los remolques recuperados habían sido remodelados por la persona adquiriente, complicando su identificación por los investigadores, ya que el mismo los compraba para restaurarlos y venderlos a terceras personas a un precio mayor, habiendo transferido dos de ellos, los cuales también han sido localizados. Una vez obtenidos todos los indicios, los agentes establecieron un dispositivo de búsqueda sobre los dos sospechosos, que culminó con su localización, detención y posterior puesta a disposición judicial.

En la última fase de la operación, los agentes del Equipo Roca (contra robos en el campo) de la Benemérita han logrado recuperar parte de los 10.000 metros de tubería de riego sustraídos en una finca y cuatro remolques agrícolas ligeros.