Visto para sentencia. Así ha quedado el juicio del hombre que se enfrentaba, en principio, al pago de dos millones de euros, en concepto de responsabilidad civil, por arar en una finca de su propiedad en la que hace años aparecieron restos romanos.

La acusación particular ha rebajado su petición de pena y ahora pide para el hombre, además de una multa, una responsabilidad civil valorada en 20.000 euros, informó Miguel Ángel Alcaraz, el abogado defensor del acusado.

En cuanto a la Fiscalía, apuesta por una multa de 1.800 euros y solicita que la responsabilidad civil se determine en la ejecución de sentencia, añadió Alcaraz. En el juicio, celebrado el miércoles en Mula, testificaron agentes de la Guardia Civil, que aseguraron que, cuando vieron que el hombre estaba arando en una tierra que escondía un yacimiento, le dijeron que parase con los trabajos. Un extremo que el acusado niega.

En cuanto al valor de los restos romanos que allí puedan ocultarse, no se podrá determinar hasta que no se excave. Algo que sí se hizo en los años 80. Se hallaron entonces monedas, columnas, trozos de cerámica y hasta un impluvium (un estanque) de la zona residencial, así como el hipocaustum (sistema de calefacción) de unas termas, todo romano. Después, el yacimiento quedó olvidado, aunque se encuentra catalogado en la Carta Arqueológica e Mula y en el Plan General de Ordenación Municipal. El acusado, un vecino de Mula. insiste en que él no tenía conocimiento de que en su finca se escondiese el yacimiento de Fuente Caputa.