Los cacos no descansan tampoco en Navidad. Al menos, no en Abarán, donde no han tenido piedad a la hora de hacerse con las monedas que los vecinos han ido tirando en el estanque del Belén municipal en los últimos días. Monedas que representan deseos e ilusiones y que ahora están en el bolsillo de alguien que no dudó dos veces antes de forzar la cerradura del local en el que se exhibe el Nacimiento.

Parece que solo querían llevarse los escasos 50 euros que los vecinos de Abarán han ido arrojando al pequeño estanque del Belén, que este pasado martes fue asaltado por unos vándalos sin que se registraran más daños que el forzado de la cerradura del local de la calle Rosario, frente al Teatro Cervantes, lugar donde el Ayuntamiento monta cada año el Nacimiento.

Ocurrió a primera hora de la tarde de este martes, cuando el vigilante, Ricardo Molina, cerró el cal por apenas media hora para irse a comer. "Como hago cada día, he cerrado a la una y media para irme a comer, pero antes de ir a mi casa me he acercado a hacer uno recados, y, al pasar por la puerta del bajo, apenas media hora después, me he dado cuenta de que la puerta estaba entreabierta. Me he acercado a ver qué pasaba y entonces he visto que la puerta estaba forzada, y al entrar me he encontrado algunas figuras en el suelo, aunque, aparentemente, no se han llevado ninguna", relataba el vigilante este martes al portal digital ´Abarán día a día´.

Además de forzar las cerraduras, algunas de las figuras fueron pisoteadas por estos ladrones en su afán de coger la hucha en forma de pequeño lago. Podo después del asalto, el Belén volvía a abrir sus puertas a un público que no ha dejado de acudir a cumplir la tradición de ver el Belén desde que se abrió el pasado día 18.

Policía Local y Guardia Civil se personaron en el lugar de los hechos y tomaron muestras y huellas dactilares que podrían dar en breve con el autor o autores de estos desagradables hechos.