La Consejería de Fomento e Infraestructuras, a través de la Dirección General de Carreteras, ha abierto al tráfico rodado la carretera RM-522, que enlaza los municipios de Ojós y Villanueva del Río Segura, tras las intensas labores de limpieza que se han llevado a cabo durante estos días por los desprendimientos producidos con motivo de las fuertes lluvias registradas durante el fin de semana.

Los efectivos de Conservación, ayudados de maquinaria, han retirado las rocas que habían caído sobre la calzada y que procedían de la ladera de la montaña y también han desarrollado labores de limpieza para eliminar el barro que cubría la calzada.

Además de estos trabajos, los técnicos han detectado deficiencias en la línea eléctrica que atraviesa la vía e ilumina el túnel del Salto de la Novia y se le ha dado ya traslado a la compañía para que lo subsane en el menor tiempo posible.

A día de hoy, dos carreteras permanecen cortadas al tráfico por los daños ocasionados por las lluvias. Una de ellas es la RM-F56, entre el Cabezo de la Plata y Sucina, que fue cortada el martes al tráfico por registrarse desprendimientos de rocas y tierra sobre la calzada y en la que se están manteniendo los trabajos de acondicionamiento necesarios para poder ponerla cuanto antes en servicio.

La otra vía que está cerrada es la RM-D13, que conecta la autovía Lorca-Águilas y el coto minero de la Cuesta de Gos, en el paraje de Los Mayorales en Águilas, y que ha registrado importantes daños en la plataforma y que actualmente no garantiza la seguridad de los conductores.

En esta vía, el Gobierno regional desarrolló durante este año una mejora integral en sus 14 kilómetros, que supuso aumentar la regularidad superficial y la rehabilitación estructural de la carretera con la reconstrucción de todo el pavimento. Esta obra contó con una inversión de más de 675.000 euros.

Con motivo de las lluvias, se han llegado a ver afectadas hasta una treintena de carreteras de la red regional y en las que han trabajado 75 efectivos del Gobierno regional para restablecer la normalidad en todas las infraestructuras viarias que han sufrido desperfectos.