Los alumnos del CEIP Nuestra Señora del Rosario de Santomera tuvieron ayer un inicio de curso atípico. La paralización de las obras en la retirada de amianto del centro escolar y la construcción del nuevo techado del centro ha hecho imposible con los alumnos empiecen el curso escolar en sus instalaciones habituales y que lo hagan desplazados a otros dos centros, algo que inquieta y genera malestar entre los padres.

Más de 200 padres y miembros del AMPA debatieron el miércoles, en una reunión que se prolongó más de dos horas, la situación en la que se encontraban sus hijos. A pesar de las distintas opiniones en conjunto decidieron que iban movilizarse. «No podemos permitir que nuestros hijos se encuentren en este limbo», comentaba una de las madres.

En los días venideros, la AMPA volverá a juntarse para organizar una concentración con la que «presionar para que se retomen las obras» y que podría tener lugar la semana próxima.

Por su parte, el Ayuntamiento ha recibido ya los resultados de las segundas pruebas de los análisis del colegio, en los que se confirmaba que «en ninguna de las doce muestras los resultados de fibras de amianto se encuentran por encima de los límites de detección». Por ello, el concejal de Obras Públicas, Joaquín Rubio, ha solicitado en un escrito al jefe de Prevención de Riesgos Laborales que «se pronuncie en cuanto a la fiabilidad y validez de los informes, con el fin de agilizar la continuidad de las obras».