La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a un año de prisión y al pago de una multa de 360 euros a un hombre que estafó a su hermano y a su cuñada con la venta de una vivienda en Mazarrón que realmente no existía. La misma pena ha sido impuesta a un amigo que participó en estos hechos delictivos, cuya autoría fue reconocida por los dos acusados al iniciarse el juicio contra ellos. La sentencia los condena, por otra parte, a indemnizar conjunta y solidariamente a los perjudicados en la suma de 27.300 euros, cantidad que queda por devolverles. La resolución del tribunal les aplica, a la hora de concretar la condena, la circunstancia atenuante de reparación o disminución del daño causado.

Tras la firma de un contrato, la cuñada entregó 5.400 euros y, posteriormente, 57.000 euros que correspondían a la «provisión de fondos para la gestión del crédito litigioso de la operación sita en Puerto de Mazarrón». Afirma la sentencia que, «tras multitud de intentos de los denunciantes para que los acusados les mostrasen la vivienda y la documentación, y ante las constantes negativas de estos, exigieron la devolución del dinero, sin recibir respuesta alguna». A pesar de haber sido requeridos judicialmente en varias ocasiones, «la vivienda que supuestamente iban a adquirir sigue sin ser identificada».