"La costa se lo lleva todo". Es lo que lamenta el alcalde de Fuente Álamo, Antonio Jesús García, a propósito de las carencias en materia de seguridad que, a su juicio, viene sufriendo su pueblo.

Después de la denuncia pública de varios vecinos, que han llegado a montar patrullas nocturnas para vigilar sus fincas, el regidor mantuvo hace unos días una reunión con el delegado del Gobierno en Murcia, Antonio Sánchez-Solís, a quien trasladó su demanda: quiere más agentes de la Guardia Civil en el municipio.

García explicó ayer a LA OPINIÓN que la plantilla de la Benemérita en la zona «está muy mermada» y que «hacen lo que pueden». Asimismo, contó que habló con Sánchez-Solís de que el interior de la Región padece «el refuerzo de la costa, por motivo de que está la gente en las playas».

«Le he pedido que se adopten medios extraordinarios por los robos y también que se refuerce la plantilla ordinaria del cuartel de Fuente Álamo, que es muy escasa», relató el primer edil. A este respecto, agregó que la merma aumenta «por las vacaciones».

«Dependemos de otros cuarteles», lamentó Antonio Jesús García. En su opinión, «en materia de seguridad ciudadana, no creo que en verano haya grandes problemas en la costa». «Cuando roban en esas zonas de playas es en invierno», consideró el regidor de Fuente Álamo.

Hay que recordar, no obstante, que la dotación, en última instancia, de efectivos de la Benemérita en cada provincia depende del ministerio del Interior, actualmente en manos de Jorge Fernández Díaz, en funciones. En la Región de Murcia, a finales del mes de junio, llegaron 40 nuevos efectivos que se repartieron en diferentes cuarteles, para trabajar no solamente en verano, sino a lo largo de todo un año.

"Le pasamos el mal a otro"

Mientras tanto, las patrullas nocturnas siguen funcionando, vigilantes cada jornada por los campos de Fuente Álamo. Después de ver cómo rompían sus vallas, saqueaban sus oficinas y reventaban los techos de sus naves, hace algunas noches que no hay robos. A los ladrones «los espantamos para otros sitios, y esa no es la solución», tiene claro Antonio Jiménez, vecino miembro de una las patrullas nocturnas que hay en marcha.

Para él, «hay que limpiar, no hay que barrer. Si se barre y esturrea, le estamos pasando el mal a otro». Así, asegura que los delincuentes, ante la presencia de las patrullas, han pasado a actuar ahora por la zona de Tallante, que pertenece al municipio de Cartagena pero está cerca de Fuente Álamo.