Bajo la sombra del Tejero, que da la bienvenida a los visitantes de la pedanía de Valentín, que comparte término municipal con Cehegín y Calasparra, más de ciento cincuenta deportistas participaban ayer en la III edición del Campeonato del mundo de Lanzamiento de Ladrillo de Valentín.
Un campeonato que cada año tiene más adeptos animados por una buena causa, ya que toda la recaudación irá destinada a la asociación Conquistando Escalones, que según recuerda uno de sus componentes, Antonio Marín, «lucha contra una enfermedad rara, la distrofia muscular de cintura LGMD1F», manifestando que «este dinero irá destinado a la investigación de la enfermedad que se esta realizando en varios hospitales y laboratorios de España». Junto con la solución a esta distrofia muscular, que únicamente sufre una familia, podría estar la cura del SIDA.
Felipe Rodríguez se alzó con el primer puesto, tras fijar una marca de 8,80 metros, seguido de David García (8 m) y de Juan Ángel Ciller (7,80 m). En categoría femenina el primer puesto fue para la lanzadora Antonia Gabarrón (4,60 m), seguida de Pepi Pastor (4,55) y de Celia Matallana (4,35 m).
