Después de veinte años el municipio de Santomera ya cuenta con su ansiada Residencia de la Tercera Edad. La empresa concesionaria, Sergesa, abrió ayer la puerta de sus instalaciones, que acogerán a 114 ancianos en régimen residencial y 25 en ocupación de día. Marta Jiménez, directora del área residencial, confirma que ya disfrutan de las instalaciones diez personas en régimen interno y tres en plazas diurnas. Actualmente todas las plazas son privadas, pero el Gobierno municipal ha presentado una petición al Instituto Murciano de Acción Social (IMAS) para conseguir un concierto de las 25 plazas del centro de día y de, al menos, el 65% de las de estancias permanentes.

Según el concejal del área, Javier Campillo, las perspectivas de esta petición son buenas. «Existe una obligación moral y legal de dar ese concierto», añade la alcaldesa Inma Sánchez. Y es que «ya hay una lista de espera de unas 900 personas de la zona para ocupar una plaza», dice el Concejal, que añade que «tenemos noticias de que el IMAS va a intentar una modificación presupuestaria en una próxima asamblea para concertar las plazas este mismo año».

Los múltiples obstáculos a los que se ha tenido que enfrentar la apertura de la Residencia no consiguió acabar con «las ganas de abrirla», cuenta Marta Jiménez. Además, el ayuntamiento de Santomera tampoco ha renunciado a llevar a buen fin esta iniciativa después de veinte años.

Tras la espera, el Ayuntamiento recibía el pasado viernes la acreditación por parte de la Comunidad Autónoma que permitía que se abriesen las puertas de la residencia, que en un futuro próximo llevará el nombre de Manuel Campillo.