«Si alguien piensa que en caso del auditorio alguien se ha enriquecido o se ha llevado algo, lo despejo por el honor de mi familia y por el honor y la responsabilidad de toda la gente que ha estado conmigo durante estos años. Tengo la conciencia muy tranquila», así de contundente se mostró el que fuera alcalde de Cehegín, José Soria (PP), tras conocerse que la Fiscalía investiga la adjudicación y los pagos del auditorio de Cehegín, a día de hoy aún sin terminar, a petición del abogado Diego de Ramón, que pide que se investigue si han podido darse delitos de «apropiación indebida, falsedad documental, malversación de caudales públicos y prevaricación».

Soria explicó que el auditorio estaba previsto que se realizara en dos fases. Sobre la primera de ellas declaró que está pagada y justificada, tanto la subvención como la modificación que se realizó para poder cerrar las obras, ya que la crisis hacía imposible la viabilidad del proyecto por el momento. Para dicha fase la Comunidad Autónoma aportó 2,5 millones, mientras que el consistorio ceheginero invirtió 1,5 millones.

Con respecto a la segunda fase explicó que «técnicos municipales y el propio arquitecto de la obra realizaron una memoria valorada, donde se ponían de manifiesto las necesidades del proyecto y se modificada el convenio con la Comunidad». En dicho convenido se mantenían las subvenciones, pero se alargaba el plazo para ejecutarlas. Dicha fase tendría un importe de 12 millones de euros, de los cuales 9 pondría la comunidad y el resto el Ayuntamiento.

Soria añadía que «recibimos 2 millones en el año 2008 y 1,5 millones en el año 2009, pero dejamos sin subvención por parte de la Comunidad hasta el año 2016».

Posteriormente, según declaró el actual diputado por el Noroeste, «después del último convenio, y viendo que la situación económica no mejoraba, se realizó otra memoria valorada, donde se reducía el valor del edificio en casi 3 millones de euros», matizando que «manteníamos los mismos servicios, reduciendo un poco el espacio».

Sobre la subvención entregada a cuenta de la segunda fase, puso de manifiesto que está reflejada en las cuentas anuales del Consistorio en el capítulo de exceso de financiación afectado. «No se ha escondido nada, ni se ha engañado a nadie», puntualizó.