El Consejo de Gobierno ha dado luz verde a la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC), con categoría de lugar etnográfico, de las salinas de Rambla Salada, ubicadas en el término municipal de Fortuna. Las salinas y los salineros han constituido durante siglos una actividad minera fundamental, con importantes implicaciones demográficas y económicas ligadas a la conservación de alimentos, el alimento del ganado, el curtido de las pieles o la gastronomía.

Las salinas muestran la evolución histórica de las diferentes estrategias para la obtención de la máxima cantidad y calidad de sal al mínimo coste, por lo que constituyen un patrimonio cultural e histórico de especial significación. Las salinas de Rambla Salada son de relativamente reciente creación, en el siglo XIX, dentro de la perspectiva regional de las salinas de interior. Así, a pesar de la dificultad técnica de explotación, se lograba una cosecha de sal cada dos semanas.

La zona incluye los restos conservados de las salinas, así como el área que ocupaban en el pasado inmediato las estructuras y elementos indispensables para su obtención, como los diques y presas destinadas a separar el agua de la rambla de las surgencias salinas.