El consejero de Fomento e Infraestructuras, Francisco Bernabé, y el alcalde de Lorca, Francisco Jódar, inauguraron ayer el resultado de las obras de regeneración urbana integral del barrio de San Diego tras los terremotos del 2011, que se iniciaron a finales de 2014 y que han precisado una inversión autonómica de casi cinco millones.

La actuación beneficiará de forma directa a los 5.000 residentes en el barrio, en el que se ha renovado la red de agua potable y se han mejorado las redes de saneamiento y de suministro de gas, y se ha instalado nuevo alumbrado y nuevo mobiliario urbano.

Los tres ejes fundamentales de la reforma han sido el rediseño del bulevar Rafael Maroto, la restauración del parque Casa Mata y la creación de dos nuevas rotondas para agilizar el tráfico de la zona. El proyecto ha incluido además la creación de un anillo periférico para mejorar la circulación rodada; el incremento en un 74 por ciento del número de plazas de aparcamiento, que pasan de 204 a las 354; la renovación de las infraestructuras urbanas y la incorporación de nuevas infraestructuras de comunicaciones, como la red de telefonía y la red wifi que reclamaban los vecinos. Se han renovado los núcleos de zonas verdes que han quedado conectados entre sí mediante un corredor transversal, la avenida de Europa, que ahora tiene cuatro carriles de circulación, un paseo para peatones y carril bici.

El parque Casa Mata también se ha remodelado y convertido en un centro para la práctica de deportes al aire libre, una oferta que se ha completado con la construcción de tres nuevas pistas de petanca y nuevas áreas de recreo.

El tráfico rodado ha quedado agilizado con la construcción de dos nuevas rotondas, una en el cruce del paso Encarnado con la Avenida de Europa y otra en la Glorieta del Sifón, para resolver los atascos que solían generarse en esa zona.