­El PSOE en Lorca ha afirmado que el 70 por ciento del regadío consolidado del municipio, unas 7.700 hectáreas, se quedará sin agua procedente de la desaladora Águilas, ya que el proyecto de construcción de la tubería que debe conducir el agua, que tiene un presupuesto de 20 millones de euros, no incluye la instalación de balsas de regulación y presión.

El concejal socialista Antonio Navarro ha denunciado que esta falta de presupuesto para la construcción de las seis balsas y los tres puntos de elevación que serían necesarios provocará que unos 2.200 regantes no tengan acceso al agua desalada, pese a que sufrirán expropiaciones de terrenos para construir la tubería que conectará el Cerro Colorado con los regadíos de Lorca y Totana.

Navarro ha explicado que «esta paradoja» ya ha sido denunciada por la Comunidad de Regantes de Lorca, con la que el PSOE comparte como mejor solución posible la construcción de tramos de tubería con sus correspondientes balsas para que cada sector que se concluya pueda ofrecer el servicio completo a los regantes.

Según argumenta, el proyecto inicial de la obra incluía la construcción de esas balsas y puntos de elevación, que fueron suprimidos después por la prolongación de la tubería de canalización en siete kilómetros adicionales para que llegase a la zona regable de Tona.

Ha recordado que también existe un compromiso de la Consejería de Agricultura y del Ministerio de aumentar la inversión necesaria para que la infraestructura sea útil, pero ha solicitado que durante la ejecución se complete cada tramo antes de continuar con el siguiente. «Si ese dinero no aparece esa tubería solo servirá para el transporte del agua», pero no para su uso por falta de presión, ha añadido, al tiempo que ha explicado que en esas condiciones solo beneficiará al 30 por ciento de los regantes de Lorca cuyos terrenos se encuentran en una cota más baja.