­La consejería de Agricultura y Agua adelantará al 1 de junio el Plan de Control de Medusas en el Mar Menor, con la instalación de redes que permanecerán hasta finales de septiembre en la mayor parte de las playas y hasta el 12 de octubre frente a las zonas hoteleras que «en esas fechas siguen teniendo afluencia turística».

Así lo anunció ayer la directora general de Ganadería y Pesca, Carmen Teodora Morales, que informó del operativo puesto en marcha por la consejería de Agricultura con el que se pretende evitar la entrada de medusas a las zonas de baño en el Mar Menor, dentro de la campaña prevista para este verano.

La Comunidad está instalando más de 40 kilómetros de redes en 60 playas del Mar Menor con las que se intenta proteger las zonas de baño de la laguna de la presencia de medusas. Este año, como novedad, se renovarán las estructuras y materiales que se emplean en este dispositivo con 400 nuevos paños, que suponen unos 20 kilómetros lineales de red «que van a sustituir a los que ya están muy deteriorados», dijo Morales.

«Con esta sustitución el sistema debe funcionar mejor», explicó la directora general, quien dijo que el objetivo es «garantizar una ordenación de las zonas de baño en el tiempo de uso y disfrute de las playas esta zona».

Las actuaciones que contempla el Plan de Control de Medusas supone una inversión de 571.000 euros y comprende la colocación y mantenimiento de redes, el seguimiento y evolución a través de un muestreo científico de las poblaciones para conocer el número de individuos, talla, peso y estado de madurez, así como la población aproximada de las dos especies predominantes en el Mar Menor, y la pesca de medusas, si fuese necesario.

Carmen Teodora Morales explicó que «no hay estudios científicos que demuestren la bajada o subida de poblaciones de medusas, aunque puede deberse a factores como la temperatura del agua, las corrientes o la presencia de más o menos nutrientes». En este sentido, indicó que «es todavía pronto para adelantar cuál será la situación de este verano».

El Servicio de Pesca de la consejería de Agricultura ha realizado hasta el momento dos muestreos y en ninguno de ellos se han detectado éfiras (medusas jóvenes) que permitan estimar la evolución de poblaciones. «Vamos a continuar con los muestreos semanales con el fin de predecir, dentro de las limitaciones que tienen esas estimaciones, cómo va a evolucionar su presencia en el Mar Menor durante la época estival», aseguró Morales.