COAG ha advertido que el calor extremo está a punto de "arrasar" 35.000 hectáreas de cereal en Caravaca de la Cruz, justo cuando los agricultores esperaban el agua de lluvia para terminar de madurar el cereal tras un brote que había sido normal.
"En lugar de agua se han encontrado con una ola de calor desconocido en la comarca en esta época del año, tan extremo que ha provocado el asurado de las espigas e, incluso, del tallo o caña, tanto de cebada, como de trigo y centeno", según informaron fuentes de COAG en un comunicado.
La organización agraria advierte que el "desastre" está "llamando de nuevo a las puertas de los agricultores que ven que sus tierras se han quedado sin humedad ninguna, lo que hace imposible la recuperación del cereal salvo que comience a llover de inmediato y cesen estos calores tan brutales".
COAG ha recordado que la pasada campaña no se segó más del 85 por ciento del cereal por la extrema sequía padecida, por lo que los agricultores "se pueden enfrentas a un segundo año consecutivo desastroso".
La organización agraria confía que, en esta ocasión, las Administraciones "muestren más sensibilidad de la que mostraron ante la anterior sequía y puedan poner en marcha algunas medidas que ayuden a los agricultores a pasar este mal trago".
