El delegado del Gobierno, Joaquín Bascuñana, y el alcalde de Abarán, Jesús Molina, presidieron ayer la Junta Local de Seguridad de esta localidad, que registró un significativo descenso de un 13% en el número de delitos y faltas en 2014 respecto al año anterior. Ambos valoraron la excelente coordinación que existe entre Policía Local y Guardia Civil para justificar este descenso. «Hay que tener en cuenta que, en ese mismo periodo, se produjo un aumento porcentual similar en el número de detenidos, lo que significa que, además de prevención, nuestros profesionales actúan con inmediatez para esclarecer los delitos, sobre todo en una zona tan atractiva para los delincuentes por su riqueza agrícola».